6 barrios a visitar en San Francisco

Este es uno de los barrios alternativos de San Francisco por excelencia, con una gran variedad cultural y demográfica, y sus primeros habitantes fueron los hippies idealistas de décadas pasadas, con una alta conciencia ecológica. Paseando por Haight St., podrás ver tiendas de ropa no convencional y vintage, cafés, disquerías para todos los gustos y comercios de artesanía y obras de arte extravagantes. Hoy en día, ya no se observa con tanta claridad el espíritu de sus primeros habitantes, y se ha convertido en un mix de grupos urbanos con diferentes formas y estilos de vida. Actualmente, sus calles acogen a jóvenes emprendedores, pordioseros, hippies modernos, turistas y latinos, entre otros. 

Está cerca del Golden State Park, por lo que puedes aprovechar de hacer una visita a él en tu paso por aquí. Si estás en la ciudad por un día o dos, puedes dejarlo para otra ocasión, pero si tienes tiempo, valdrá la pena conocer este pedazo de la cultura más alternativa de San Francisco.

El barrio de Castro, delimitado entre la calle Market y la 18th St, es centro de la comunidad gay, siendo probablemente el más famoso (y mayor) barrio de esta comunidad en el mundo. Esta comunidad comenzó a moverse hasta aquí durante las décadas de los 60’s y 70’s, y hoy el barrio muestra una profusión de banderas multicolores junto a casas no menos llamativas, con un ligero toque europeo en su arquitectura. Algunos puntos de interés son el Teatro de Castro y el Harvey Milk Plaza. 

Este barrio ha sido motor de varias transformaciones urbanas de la ciudad. Fue en un principio una zona donde habitaba la inmigración irlandesa, para luego pasar a ser el barrio latino por excelencia, pero hoy cada vez más son los locales afluentes quienes comienzan a habitar en sus calles, en parte debido al aumento del costo de vida, y por ende, del alquiler. En la actualidad se el considera el barrio más hippie de la ciudad, siendo hogar de la generación hipster, lo cual se refleja en sus alternativos cafés, tiendas de ropa vintage y comercios.

Si quieres conocer el corazón del barrio, anda a Dolores Square y disfruta de las vistas a la ciudad junto a otros jóvenes. Si hace calor, será un buen momento para disfrutar de un picnic bajo el sol. Existe una gran diversidad gastronómica en la zona, pero se puede decir que la comida mexicana aún es la estrella del show (si bien también hay varios locales de comida china) por lo que no dudes en comer en alguna de sus clásicas taquerías.

Este barrio es uno de los más famosos de la ciudad y del mundo, y fue comenzando a crearse con la immigración de los chinos que escapaban de las Guerras del Opio, a comienzos del siglo XIX. Los chinos primeramente trabajaron como semi-esclavos en las minas de oro y luego ayudaron a andar en las líneas ferroviarias, formando de a poco su propio barrio en la ciudad. 

Algunos de los hitos del barrio son la Puerta de Chinatown (Grant Avenue con Bush St.)y la Plaza de Portsmouth (aquí se izó por primera vez la bandera de Estados Unidos en 1846). La calle Stockton es la principal arteria de comercio, con infinidad de productos de origen chino. Si almuerzas en un restaurant (recomendado), no te olvides de solicitar las galletas de la fortuna, pues fueron aquí donde se hicieron por primera vez. 

No debes dejar de pasar por Fisherman’s Wharf, en la zona del antiguo puerto pequero de la ciudad y que en la actualidad es una de las zonas más visitadas de la ciudad, con variadas opciones de ocio y oferta gastronómica. Originalmente llamada Meiggs’ Wharf, el nombre actual deriva de los numerosos pescadores que encallaban sus botes aquí. Hoy en día, hay 2 marinas con más de 300 botes privados estacionados, y es el lugar de partida para los paseos en barco hasta la cercana isla de Alcatraz.

Las estrellas de la zona son los numerosos leones marinos en el Pier 39, los cuales disfrutan de no hacer nada durante las tardes, y unas cuantas fotos de ellos no deben faltar en tu viaje a la ciudad. Otras atracciones son el Museo de Ripley (175 Jefferson St.) y el Museo de Cera Madame Tussauds, con réplicas de famosos personajes. Apesar del gentío, aún se puede respirar algo del antiguo San Francisco en este lugar. Hay diversidad de restaurantes en el paseo costero, pero si no quieres comer en alguno de ellos, está la opción de probar algunos bocados con sabor marino de los puestos de comida callejera de la costanera.

Para llegar en cable-car, debes tomar la línea Powell-Mason y bajarte en la última parada, y caminar hasta el embarcadero.

Union Square es la plaza más céntrica y comercial de la ciudad, y su nombre deriva del hecho de que fue en esta plaza donde los manifestantes apoyaban al Ejército de la Unión en la Guerra Civil. Hoy, acoge expresiones y eventos públicos de otra naturaleza, como conciertos al aire libre, festivales y exposiciones. Es el lugar para hacer compras por excelencia de la ciudad, y en sus cercanías podrás ingresar a los mayores almacenes, como Macy’s y Bloomingdale’s, además de ser el punto donde se encuentran algunos de los mejores hoteles y restaurantes de la ciudad. Si ya has sobrepasado el límite de tu tarjeta de crédito, simplemente siéntate en algunos de sus cafés y disfruta de ver pasar a la gente mientras dejas pasar la tarde.